Uno de los 14 cachalotes muertos apareció varado en una playa de King Island, al norte de Tasmania, Australia, el martes 20 de septiembre de 2022.
Más de una docena de ballenas murieron y fueron arrastradas a la costa en las playas de King Island, al norte de Tasmania, lo que dejó a los expertos en vida silvestre sacudiendo la cabeza.
Los cuerpos fueron reportados por primera vez por los lugareños el lunes por la tarde, reveló el Departamento de Recursos Naturales y Medio Ambiente de Tasmania.
El personal del Servicio de Parques y Vida Silvestre está en el lugar monitoreando la situación. No se ha dado ninguna razón exacta para el evento de disparo, que actualmente está siendo investigado por científicos marinos.
“Es posible que las ballenas fueran parte del mismo grupo de solteros, un grupo de cachalotes machos más jóvenes que se asociaron después de abandonar el grupo materno”, dijo un portavoz del departamento.
“Se recuerda al público que es un delito interferir con la vida silvestre protegida, incluida la posesión de partes de una ballena muerta, y se les pide que mantengan la distancia.
“Simplemente no sabemos por qué sucede esto”, dijo a ABC la científica de vida silvestre Vanessa Pirotta. “Esa es la pregunta del millón cada vez que ocurre este tipo de eventos”.
“Podría haber algo más que los arrastró a la zona, pero no lo sabemos.
“Pero la clave aquí es que cualquier varamiento puede contribuir a la ciencia.
“Ahora las autoridades realizarán una necropsia, que es la autopsia de un animal, para tratar de entender qué pudieron haber estado haciendo estos animales, pero también para aprender más sobre ellos”.
El varamiento se produce casi exactamente dos años después de que 470 ballenas fueran varadas en la costa occidental de Tasmania, lo que marca la misión más grande jamás realizada en el país.
La mayoría de las ballenas fueron descubiertas en LiƄerty Bay.
Uno de los 14 cachalotes muertos arrastrados por una corriente en King Island, al norte de Tasmania, Australia.AP
Los equipos de Geѕсᴜe lograron liberar a 25 de las 270 ballenas varadas con sandalias frente a Strahan, pero un pequeño número intentó regresar a sus manadas y llegar hasta ellas por su cuenta.
A pesar de los valientes esfuerzos, más de un tercio de los calderones murieron antes de que los rescatistas pudieran llegar hasta ellos.